Recientemente, CDKN financió un Proyecto para la medición de la huella de carbono e hídrica de La Paz, Quito y Lima, con el objetivo de complementar y apoyar las iniciativas municipales relacionadas a la mitigación y adaptación del cambio climático en las tres ciudades, a través de la evaluación de la Huella de Carbono y Huella Hídrica a nivel de gobierno municipal y a nivel de ciudad, utilizando los resultados y conclusiones obtenidas para promover acciones de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero y gestión hídrica.

Como parte del proyecto se produjeron las siguientes publicaciones que los invitamos a revisar:

• Evaluando la Huella de Carbono y la Huella Hídrica de ciudades andinas como una estrategia para promover un desarrollo compatible con el clima: el caso de La Paz, Bolivia
• Evaluando la Huella de Carbono y la Huella Hídrica de ciudades andinas como una estrategia para promover un desarrollo compatible con el clima: el caso de Quito, Ecuador
• Evaluando la Huella de Carbono y la Huella Hídrica de ciudades andinas como una estrategia para promover un desarrollo compatible con el clima: el caso de Lima, Perú

De acuerdo a los datos proporcionados por el Proyecto, la Huella de Carbono de Lima Metropolitana está compuesta principalmente por el sector transporte (36%), seguido de los sectores industrial, residencial, comercial y residuos. La Huella Hídrica de Lima equivale a 15 veces el actual uso anual de agua de su población, y se debe principalmente a la Huella Hídrica gris (95%).

Por otra parte, el sector que más contribuyó a la Huella de Carbono del Distrito Metropolitano de Quito es transporte, con más del 50% del total. El sector con mayor contribución a la Huella Hídrica de la ciudad es el residencial, con 85% del total, primordialmente debido a la Huella Hídrica gris.

En el caso de La Paz, la evaluación de la Huella de Carbono permite a la ciudad cumplir con compromisos internacionales, como reportar su inventario de GEI al Registro Climático de Ciudades (carbonn), bajo el Pacto de la Ciudad de México. La evaluación de la Huella Hídrica le permite formar parte del primer esfuerzo a nivel global para medir la Huella Hídrica de una ciudad.