La Universidad del Norte ha publicado recientemente el libro “Desplazamiento climático y Resiliencia: modelo de atención a familias afectadas por el invierno en el Caribe Colombiano”, el cual es resultado del proyecto “Creciendo en la adversidad”, apoyado y financiado por la Alianza Clima y Desarrollo – CDKN. Se trata de la primera publicación en Colombia en explorar la relación entre cambio climático, desplazamiento climático y la creación de estrategias de resiliencia social y psicosocial en comunidades vulnerables del país.

El estudio se realizó en 90 familias desplazadas por acontecimientos climáticos en el municipio de Manatí, Departamento del Atlántico. Se buscó entender los impactos psicosociales de los eventos climáticos extremos en comunidades vulnerables y desplazadas. De igual manera, se desarrolló un modelo de intervención psicosocial en dichas comunidades para generar mayor resiliencia así como estrategias para superar los traumas vividos por sus habitantes.

El libro analiza esas dimensiones y demuestra que se deben considerar de manera conjunta las dimensiones materiales y de infraestructura con las psicológicas y psicosociales, pasando de una visión reactiva, humanitaria y material, a una visión preventiva, de resiliencia integral y de largo plazo. Plantea también recomendaciones de política pública y contribuye a posicionar el tema del desplazamiento climático visto desde una perspectiva psicosocial  y de resiliencia en la agenda nacional de cambio climático y riesgo.

El cambio climático aumenta el riesgo psicosocial en comunidades vulnerables

Los eventos climáticos extremos que afectaron Colombia en el 2010-2011 resultaron en el desplazamiento de decenas de miles de personas en el país. Estas circunstancias evidenciaron por un lado que las personas más impactadas y susceptibles al desplazamiento climático forzado pertenecen a comunidades socio-económicamente vulnerables; y por otro lado, que hay una necesidad urgente de generar mayor resiliencia física y material así como social y psicosocial en ellas.

Este episodio permitió entender mejor que el desplazamiento climático se acompaña de múltiples problemáticas sociales, económicas y psicológicas, las cuales reclaman una atención particular. Crea trastornos e inestabilidad. Altera el tejido socio-económico del territorio, los lazos dentro de la comunidad y entre las comunidades de una región. Exige la reorganización de la economía local y comunitaria que está basada principalmente en economía de subsistencia y crea grandes traumas psicológicos en la gente, los cuales son difíciles de cuantificar. En este sentido, se vuelve sumamente importante crear estrategias de resiliencia psicosocial no solo para responder a la situación inmediata sino también para prevenir y preparar a las comunidades ante futuros acontecimientos climáticos.

Tomando en cuenta que las proyecciones climáticas indican un aumento en la frecuencia e intensidad de los fenómenos climáticos extremos, existe un gran reto para el país en cuanto a prepararse para reducir el riesgo y sus impactos reales en las poblaciones más vulnerables.

Ver / descargar publicación