Generando resiliencia al cambio climático en la infraestructura de transporte de Colombia

Generando resiliencia al cambio climático en la infraestructura de transporte de Colombia

Compartir este artículo:
Detalle:
Fecha: 25 de febrero, 2013
Etiquetas: adaptación, resiliencia

Claudia Martínez, Steven Price y Mathieu Lacoste, informan sobre un proyecto de la Alianza Clima y Desarrollo (CDKN) que busca mejorar la infraestructura de transporte en Colombia, haciéndola al mismo tiempo resiliente y menos vulnerable al cambio climático.

Colombia presenta un rezago importante en la infraestructura de transporte en todas sus modalidades[1]. En términos de calidad de carreteras, el país ocupa el puesto 126 entre 144 naciones, una posición similar a la de Lesoto (110) y muy inferior a la de Kenia (72), Nicaragua (75) o República Dominicana (62). Con relación a las vías férreas, Colombia ocupa el puesto 109 y la situación no varía para puertos (puesto 125) ni para transporte aéreo (puesto 106)[2].

Al mismo tiempo, se considera que Colombia es uno de los países más vulnerables al cambio climático en el mundo, sin embargo su infraestructura es poco resiliente a los fenómenos climáticos extremos que lo afectan. El solo fenómeno “La Niña”, que castigó al país en el 2010 y 2011, generó pérdidas equivalentes a 1.800 millones de dólares (3,2 billones de pesos o 2% del PIB), de los cuales el 38% se concentró en infraestructura. El Ministerio de Transporte de Colombia estima que se requieren más de 3.100 millones de dólares (6 billones de pesos) para rehabilitar la infraestructura nacional.

En consecuencia, las deficiencias de la red de transporte, la falta de resiliencia de la infraestructura y los riesgos climáticos que pesan sobre ella, amenazan y reducen drásticamente la competitividad de la economía nacional y el crecimiento económico del país. Sumado a la perspectiva de entrada en vigencia o firma de varios Tratados de Libre Comercio (TLCs) en los próximos meses, el estado y eficiencia de la infraestructura nacional, especialmente de la vial primaria, se convierte en un punto neurálgico en la ecuación del desarrollo económico y cambio climático. El mismo Presidente de la República ha puesto entre sus más altas prioridades el objetivo de construir y mantener una red de transporte e infraestructura moderna y eficiente, como pilar para impulsar la competitividad y el desarrollo económico de Colombia. En línea con esa apuesta estratégica, el país está en proceso de licitación de mega-obras de infraestructura vial.

Con el fin de atender este dilema y aprovechando un momento coyuntural propicio en el país, CDKN dio inicio, de la mano con el Ministerio de Transporte de Colombia y sus agencias adscritas (Agencia Nacional de Infraestructura – ANI y el Instituto Nacional de Vías – INVIAS), a un proyecto pionero orientado a encontrar soluciones para el aumento de la resiliencia y la disminución de la vulnerabilidad de la infraestructura vial en pro de la competitividad del país. Este proyecto, implementado por ICF[3], busca la incorporación de la adaptación al cambio climático en el sector de la infraestructura vial. Contempla la creación de una Guía Técnica Práctica para integrar la dimensión de cambio climático en los procesos de licitación para la rehabilitación o construcción de infraestructura vial, así como la elaboración de un Plan de Adaptación con miras al aumento de la competitividad presente y futura del sector.

Este proyecto se alinea y refuerza la estrategia de choque emprendida por las autoridades nacionales, particularmente por la Agencia Nacional de Infraestructura-ANI, para entender la vulnerabilidad presente de la infraestructura y agilizar la construcción de carreteras de última generación, respondiendo a la urgencia de contar con una red vial funcional y de calidad. En este sentido, el proyecto permite no solo que se mire la adaptación como un componente central para solucionar la vulnerabilidad de la infraestructura vial, sino también que se inserte el tema de riesgos, resiliencia, adaptación y vulnerabilidad a futuro como factores determinantes en los procesos de licitación y el desempeño de las concesiones. Es una señal clara de la apuesta que hace el Gobierno para visualizar las carreteras de Colombia a la luz del cambio climático en 20 a 50 años, apuntando al aumento de la resiliencia futura de las obras de infraestructura y las concesiones, maximizando el rendimiento de la inversión pública.

Adicional a eso, la construcción, rehabilitación y mejora de la red vial nacional y de obras de infraestructura se realizarán en el marco del esquema de Alianzas Público-Privadas, en virtud de la Ley N°1508 del 2012[4], lo que constituye una oportunidad sin precedentes para introducir la adaptabilidad al cambio climático y la resiliencia a futuro dentro de los pre-requisitos, pliegues de condiciones y parámetros que aplicarán en el sector. En ese sentido, el actual proyecto de CDKN -que posiciona el tema de la adaptación como un componente estratégico en el diseño de las licitaciones, y la construcción de vías de calidad impulsando la competitividad del país de largo plazo- contribuirá a la inserción rápida de dichas consideraciones en el diálogo sectorial y el modelo de Alianzas Público-Privadas que aplican en el sector.

En manos del Ministerio de Transporte, la ANI e INVIAS (con el apoyo de ICF), está el desafío de  incluir de manera efectiva la adaptación en el nuevo modelo de Alianzas Público-Privadas que operarán en el sector de infraestructura y transporte colombiano.

[1] Foro Económico Mundial (2011). Informe Anual de Competitividad Global 2010-2011.

[2] Comisión de Infraestructura (2012). Informe Comisión de Infraestructura 2012.

[3] ICF es una consultora internacional de gran renombre que ganó la convocatoria para liderar el proyecto financiado por CDKN, dentro de las 19 propuestas de alto nivel que se revisaron.

[4] La Ley 1508 de 2012 crea un marco novedoso para las alianzas público privadas en el país. A modo de ejemplo, esta norma permite que el sector privado pueda proponer formalmente ideas innovadoras de interés público al Estado; garantiza los procesos de licitación pública; el Estado no está habilitado a invertir más del 20% del total de las obras; aplica aun para el sector transporte e infraestructura vial; se establece un tope concesionario de 30 años, entre otros.

Añadir nuevo comentario

Texto sin formato

  • No se permiten etiquetas HTML.
  • Saltos automáticos de líneas y de párrafos.
  • Las direcciones de correos electrónicos y páginas web se convierten en enlaces automáticamente.
CAPTCHA
Esta pregunta es para comprobar si usted es un visitante humano y prevenir envíos de spam automatizado.