¿Cuál fue la posición de Estados Unidos, China y Canadá durante la firma del Acuerdo de París?
¿Cuál fue la posición de Estados Unidos, China y Canadá durante la firma del Acuerdo de París?
Durante la firma del Acuerdo de París, tres potencias del G7 mostraron optimismo frente al reto del cambio climático y resaltaron la necesidad del compromiso de los países para ratificar el acuerdo. Informa Jorge Villanueva, Coordinador de Comunicaciones para América Latina de CDKN.
Con un discurso breve y directo, el Secretario General de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon, dio inicio, en Nueva York, a la ceremonia de alto nivel para la firma del Acuerdo de París, evento en el que representantes de al menos 155 países se reunieron para firmar el mayor acuerdo climático de la historia.
“El día de hoy estamos rompiendo un récord en esta reunión, pero fuera de aquí también se rompen récords, en aumento de la temperatura global, retroceso de glaciares, altos niveles de carbono en la atmósfera”, señaló el Secretario General, recordando que nos encontramos en una carrera contra el tiempo y que los países deben actuar rápidamente, tanto a nivel internacional como nacional. En este sentido, remarcó que este acuerdo debe convertir las intenciones en acciones para el bien de esta y las futuras generaciones.
Es importante recordar que uno de los objetivos del Acuerdo es limitar el aumento de la temperatura promedio global a 2°C con relación a la era preindustrial, y hacer todos los esfuerzos porque dicho aumento no sobrepase los 1.5°C.
¿Cuáles fueron los mensajes de Estados Unidos, China y Canadá?
De acuerdo a John Kerry, Secretario de Estado de los Estados Unidos de Norteamérica, el poder de este acuerdo reside en la oportunidad que representa, en el mensaje que se envía al mercado, y en la inequívoca señal de que la innovación, la actividad empresarial, la colocación de capital y las decisiones que los gobiernos tomen serán decisivas para el futuro energético del planeta. Así, el poder del acuerdo consiste en lo que hará para destrabar al sector privado, y lo que ya se está haciendo para llevar a la economía mundial por un nuevo camino, hacia un desarrollo inteligente, responsable y sostenible. “Ya el año pasado, la inversión en energías renovables alcanzó los niveles más altos con casi US$ 330 mil millones y se predice que se invertirán decenas de billones de dólares hacia la mitad de este siglo”, señaló. Por otra parte, Kerry indicó que, por primera vez en la historia, a pesar de los bajos precios del carbón, petróleo y gas, se ha invertido más a nivel mundial para impulsar las tecnologías en energías renovables que en nuevos planes orientados a combustibles fósiles. “Hoy se sabe que el nuevo futuro de la energía, las eficiencias, los recursos alternativos, las opciones limpias, y nada de lo que tenemos que lograr, está por encima de nuestra capacidad tecnológica. La única pregunta es si está más allá de nuestra determinación”, concluyó.
Por su parte, China hará los arreglos legales domésticos necesarios para ratificar el Acuerdo de París antes de la reunión del G20 que se llevará a cabo en setiembre de este año, tal como lo indicó el Primer Ministro de dicho país, Li Keqiang. Así, se tomará acciones domésticas para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI), tratando de llegar a un pico de emisiones de carbono alrededor del 2030 para luego descender. Debido a ello, ha incorporado un conjunto de medidas en su Plan Nacional de Desarrollo y se ha comprometido a reducir la emisión de carbono por unidad de PBI en 18% en los próximos cinco años. Asimismo, implementará medidas estrictas de rendición de cuentas para asegurar el cumplimiento de las metas para proteger el ambiente e incrementarán el apoyo internacional para enfrentar el cambio climático.
En el caso de Canadá, el Primer Ministro, Justin Trudeau, resaltó que el cambio climático no solo es un desafío que hay que enfrentar sino una oportunidad para impulsar un crecimiento económico limpio y generar empleos bien remunerados, recordando que Canadá, junto a otros 19 países, busca duplicar la inversión en tecnología verde en los próximos años. Y la tendencia es clara, el año pasado se invirtió a nivel mundial 60% más en energía proveniente de renovables que de combustibles fósiles, lo cual representa una clara oportunidad para el mundo. Por otra parte, uno de los puntos más contundentes de su discurso fue asegurar que el rol de su país no se limita al nivel nacional, sino a los países en desarrollo, dado que “los países en desarrollo no deben ser castigados por un problema que no han creado”, añadiendo que en los próximos años su país desembolsará US$ 2,600 millones para ayuda a estos países.
A tener en cuenta
El acuerdo se firma en el Día Mundial de la Tierra y en un contexto de acciones mundiales que van más allá del acuerdo en sí mismo. Diversos países en desarrollo vienen haciendo lo propio en el ámbito nacional en términos de mitigación y adaptación al cambio climático, al menos 30 ciudades europeas tienen el compromiso de reducir en 40% sus emisiones de gases de efecto invernadero, una sociedad civil global cada vez más consciente de la importancia de des-carbonizar la economía y desvincular el crecimiento económico de las emisiones de GEI, e inversiones mayores en tecnologías limpias a pesar de los bajos precios de los combustibles fósiles. Todo esto es fundamental si se tiene en cuenta que el Acuerdo de París aún debe ser ratificado al interior de cada uno de los países signatarios, y dado que entrará en vigencia recién en el 2020, las acciones actuales para enfrentar el cambio climático son tan necesarias como el propio acuerdo.